Te hablo desde la lejanía
Te hablo desde el recuerdo distante
Te hablo desde el sueño, sin comienzo
Así todo comienza, con gran alevosía, un hecho diminuto, insignificante
para la maza de seres Comunes, pero no para el amante empedernido, que nunca
logro olvidar. Así te conocí, así te soñé,
así te escribí.
Recién te había visto Cinco minutos, y ya soñaba con una
vida juntos, soñaba con una vida llena de risas, de ternura, nunca de momentos
malos (Porque alguien soñaría con momentos malos, Cuando la luz llega hasta los
ojos nubla las sobran que se acercan).
Pero rápidamente la luz destellante que iluminaba mis ojos,
se opaco bajo el brazo de la tiniebla
que te posea cada vez más.
Me vi obligado a hacer algo que no podía, olvidarte.
Me aleje, pero nunca te olvide, simplemente tuve que esconderme,
para protegerte, mimarte como cual sombra que trata de pasar desapercibida en
la oscuridad.
Te grito desde la cercanía
Te grito desde el presente mutable
Te grito desde el sueño, aun sin comienzo.
Una nueva cercanía comienza, gracias a un hecho que nadie
esperaba. Volví a sentir que tu luz llegaba de nuevo a tocar mis ojos, ya la
tinieblas no se veían, era un camino directo a entre tu luz y mis ojos
soñadores. Pero la oscuridad seguía hay, pero ahora nos apoyaba en vuestros
encuentros fortuitos, y nos preparaba un momento preciso para un descuido, un
accidente que obligo que hasta nuestras mente lo borraran por el dolor de saber
que no fue un accidente, fue una daga mortal.
Y así fue como todo comencé a recordar por que escribo
Por el sentimiento que me haces sentir.
Te susurro un mensaje distante
Te susurro los momentos pasados
Te susurro desde un sueño , sin comienzo , pero si con un
Final.